En ocasiones, cuando acudimos a un servicio de mantenimiento de la calefacción en Zaragoza, al inspeccionar el estado de la instalación y comprobamos que, efectivamente, la casa está fría, lo que sin duda es una señal de que la calefacción no funciona correctamente. Hay veces en las que localizar la causa de este problema es bastante sencillo y, en ese caso, la solución del problema no va a exigir un gran desembolso.

Si no logras que, en invierno, las habitaciones de tu casa alcancen una temperatura agradable puede no ser un problema de la caldera, hay otras posibles causas que deberías comprobar antes de meterte en un gasto importante como es el de comprar una caldera nueva. Comprueba que las ventanas y puertas están bien aisladas. Pasa una vela encendida o un mechero por las proximidades de los bordes de las ventanas, si la llama oscila o se apaga, has encontrado un punto por el que se te escapan las calorías. Si es así, para resolver el problema, más que un técnico en el mantenimiento de la calefacción en Zaragoza, necesitarías la ayuda de un especialista en aislamiento.

Puede ocurrir que los radiadores no alcancen suficiente temperatura  y, aunque este sí que es un problema de la calefacción, es probable que tampoco sea cosa de la caldera. Hay que los radiadores comprobar que no tienen bolsas de aire en su interior abriendo la válvula que está en la parte superior dejando que salga el aire. Asegúrate de que tiene abierta la llave de paso. Aunque te parezca una avería muy simple, ni te imaginas cuántas veces esa ha sido la causa de que no funcionaran los radiadores, y por las que los técnicos de Gasiman, S.L. se han desplazado a un domicilio para solucionar un problema de la calefacción.